El
uso del Aloe se remonta a los orígenes de la humanidad. Los chinos
fueron los primeros en usar el Aloe y en el antiguo Egipto era
comúnmente utilizado. Era la planta de la inmortalidad y se incluía
entre los regalos funerarios enterrados con los faraones. Ya,
en el siglo I de nuestra era, Dioscórides lo describió intensamente
en su herbario griego por sus virtudes medicinales y cosméticas. Los
Franciscanos españoles la trasladaron desde nuestras tierras a
América, seguramente a la isla Barbados, de donde viene su actual
nombre científico Aloe Barbadensis.
Actualmente
sus propiedades han sido comprobadas clínicamente y los científicos
se interesen cada vez más por sus aplicaciones médicas. La
NASA lo utiliza porque absorbe el 90% de la toxicidad de sustancias
como el PVC, la fibra de vidrio, los barnices, las pinturas, las
radiaciones de los ordenadores, los televisores y demás aparatos
electrónicos.
Se cree que trae buena suerte, y es muy utilizada en los rituales chamánicos por su gran poder energético y porque purifica el alma.
Pero,
¿cuales son sus verdaderas virtudes?
El
Aloe Vera es un excelente limpiador y antiséptico natural que
penetra fácilmente en la piel y en los tejidos, que actúa como
anestésico calmando todo tipo de dolores (especialmente los
musculares y de las articulaciones) y tranquilizando los nervios.
Posee una gran actividad bactericida, es fungicida,
anti-inflamatorio, antiprurítico, altamente nutritivo (contiene
vitaminas, minerales y azúcares), dilata los capilares sanguíneos
incrementando la circulación en la zona afectada, descompone y
destruye los tejidos muertos, favorece el crecimiento celular normal
(acelerando la curación de llagas y heridas), hidrata los tejidos y
es antipirético (elimina la sensación de calor en las llagas,
úlceras e inflamaciones).
El
Aloe Vera administrado por vía oral es capaz de reducir los niveles
de glucosa en sangre, y tiene efectos beneficiosos sobre los niveles
sanguíneos de colesterol y triglicéridos. Según
recientes ensayos con ratones, parece que el consumo oral pueda
disminuir el número y tamaño de los papilomas e, incluso, reducir
la incidencia de tumores en el hígado, el bazo y la médula ósea.
El
Aloe puro tiene un sabor amargo muy característico, que dificulta su
ingestión. En eltedelascinco.com podrás encontrar distintos tipos
de té e infusiones que unen el sabor y las propiedades del té, a
las muchas propiedades de esta planta: té negro con Aloe Vera, téverde con Aloe Vera y rooiboos con Aloe Vera.
Una
buena opción para disfrutar del placer de un té 100% saludable!